[ Canon EOS 70D | obj.16/300 en 57mm | 1/1000s | f/5 | ISO 200 ]
(26-Dic-2016) Ya cercana la puesta de sol, la muralla de Ávila empieza a recibir esos rayos rojizos que le dan un tono fantástico. Además el cielo estaba de un azul intenso, sin una sola nube, y el árbol a contraluz me brindaba el contrapunto fantástico para equilibrar la foto.
Por cierto, que en la parte inferior izquierda de la foto podemos ver la puerta tapiada en la muralla sur, que tiene que ver con el Palacio de los Dávila, y tiene la siguiente historia: cuenta la leyenda que Pedro Dávila en 1541 se enfrentó al concejo de Ávila al abrir en su propiedad una puerta particular de acceso a la muralla situada en el lienzo sur en el paseo de rastro; el concejo obligó a Don Pedro Dávila a tapiarla y quedando tocado en su orgullo abrió una nueva puerta esta vez intramuros y contigua a la puerta principal del palacio con la leyenda inscrita bajo ella "cuando una puerta se cierra otra se abre".
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