miércoles, 16 de noviembre de 2011

¡Un año de blog!

Tal día como hoy, hace un año, publiqué mi primera foto del blog. Un blog que se inició después del viaje a Sepúlveda que hicimos mi mujer y yo el día de su cumpleaños, y del que traje tantas fotos bonitas que tuve que abrir un blog para publicarlas...

Desde entonces han transcurrido 365 días publicando una foto nueva cada día, y sólo he dejado de publicar durante algunos días de Junio por estar en la playita... ;-)

Creo que este es el momento perfecto para ponerme filosófico con respecto a cómo ha cambiado mi fotografía en este año... Aunque claro, todo lo que voy a contar es desde mi propio punto de vista, me gustaría que alguien más me hiciera sus propios comentarios sobre mi "evolución fotográfica". ^_^

Lo primero que me viene a la cabeza es que sí, mi fotografía ha cambiado. Evidentemente desde mi punto de vista, ha cambiado a mejor. Desde que me compré la primera réflex hace casi cuatro años he leído mucho sobre fotografía, pero es desde que tengo el blog que me he esforzado por poner en práctica todas las cosas que había leído (ya sólo me faltan las fotos con gente, prometo pulirme en ese tema).

Otro tema importante para mi es la oportunidad: hasta que empecé el blog, la cámara la sacaba de paseo sólo en los viajes, o en ocasiones importantes. Me parecía un trasto muy grande y muy incómodo para llevarlo siempre colgado... Pero desde que tengo el blog, lo cierto es que la llevo siempre que salgo de casa, ya es como la cartera o el móvil, si me la dejo en casa lo paso mal. ;-)  Me he acostumbrado al peso, al volumen, a los bandazos que pega cuando me agacho para hacer algo con mi hijo...

Otra cosa que he notado, y que hasta puedo decir que me ha sorprendido, es que cuando tomo varias fotos de un mismo motivo, variando el encuadre o la luminosidad, normalmente me acabo quedando con la primera foto que tomé. No sé si será porque la primera es la más "fresca", la más espontánea, o la que realmente captó mi atención sobre algo que luego me dediqué a ametrallar con la cámara, pero el caso es que en un porcentaje muy alto de las ocasiones me quedo con esa primera foto, por mucho que me haya esforzado en las siguientes.

También las post-edición de las fotos ha cambiado. Al principio me limitaba a ajustarle un poco los niveles y p'adentro, y ahora hay veces que me tiro horas con una sola foto, para dejarla estupenda. A veces tengo que juntar varias fotos en una sola, usando capas y transparencia, para resaltar las partes importantes de la fotografía. Pero es algo que me gusta hacer, que disfruto haciendo y con el resultado.

Y por último, comentar que estoy recibiendo críticas muy positivas sobre mi evolución y sobre mis fotos, lo que no sólo "me llena de orgullo y satisfacción" sino que me alienta a sseguir haciendo algo que me gusta mucho: la fotografía como modo de expresión.

Y poco más que contar por aquí, ¡nos vemos en la foto 400!  ;-)

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Un fuerte abrazo a todos,
Iñigo.

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